Hasta hace unos años, lo más importante era integrar soluciones On Line en la oferta educativa en las instituciones, este tema movía el mercado y el objetivo era vender e implementar un LMS, así como invertir en virtualizar programas. A lo largo de los últimos 5 años los modelos de educación en línea han madurado y se han desarrollado de forma muy vertiginosa.
Sin embargo, ahora esas instituciones ya maduras, están buscando cambiar de LMS, cambiar la experiencia de sus estudiantes, docentes y administradores. ¿Por qué arriesgarse a cambiar si el LMS que tienen funciona?, ¿Por qué invertir tiempo, esfuerzo y recursos para evaluar nuevas tecnologías?, ¿Qué es lo que está motivando estos cambios?
Las respuestas resultan muy interesantes y tienen motivadores muy poderosos:
Los docentes y administradores necesitan pasar menos tiempo administrando la plataforma y pasar más tiempo enseñando y acompañando a los estudiantes
La satisfacción de los estudiantes está relacionada con la velocidad de atención. Por lo tanto, requieren reducir las solicitudes de soporte técnico, se requieren interfaces más fáciles e intuitivas.
El éxito académico se beneficia cuando se implementan estrategias que mejoran el aprovechamiento escolar, como el aprendizaje adaptativo, rubricas semiautomáticas
Las nuevas generaciones requieren de plataformas hechas por millennials para millennials: Fáciles, intuitivas y atractivas
La cada vez más rápida adopción de teléfonos inteligentes, sumado a que consumimos más internet desde nuestros dispositivos personales se requieren herramientas para un aprendizaje realmente móvil que integre la interfaz, las herramientas, y el diseño responsivo
La cultura cada vez más visual, la facilidad para consumir videos requiere que las instituciones de educación fomenten y exploten la video enseñanza con herramientas que permitan transmitir clases en vivo, asignar video tareas, aplicar rúbricas a una tarea en video, y retroalimentar a los estudiantes en video.
La autodeterminación, la automotivación y la resiliencia son características que las nuevas generaciones tienen muy arraigadas, resulta imperativo contar con herramientas que permitan a los estudiantes llevar un récord de sus evidencias de desempeño y que puedan compartir sus logros con sus compañeros.
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